Un café con decoración híbrida. Una tarde no demasiado gris. Un grupo de seis amigos de no más de treinta. Yo, como siempre, más interesado en lo que pasa en las otras mesas.
–Laura tiene una teoría sobre la vida –dijo una pelirroja alta señalando a una flaca de cabello negro y mirada inteligente–. Cuéntasela, Lau.
La flaca no se hizo del rogar.
–OK. La vida es un plato –soltó sin más preámbulos.
–¿Un plato? –preguntó él, un tipo guapo, de cabello abundante y mirada de infinito aburrimiento.
–¿Te esperas? –respingó Laura.
–OK, OK –condescendió él.
–La vida es un buffet –retomó ella.
–¿No era un plato? –reviró él, feliz.
–¡Carajo, ¿me vas a dejar contártelo?! –explotó Laura.
–OK, perdón –dijo él sin convencimiento.
–La vida es un buffet –repitió Laura–. Al nacer te dan un plato y tú decides con qué llenarlo. El plato, como cualquier plato, es limitado así que debes decidir qué poner ahí. Así como en los buffets hay gente que se sirve sólo postres o camarones, igual pasa con la vida. Si quieres que en tu vida haya, por ejemplo, sólo dinero, no dejarás espacio para nada más.
–Pero si tienes dinero puedes comprar el plato que quieras –argumentó él con un gesto que dejaba en claro que pensaba que la teoría era una estupidez.
–Sabía que no lo entenderías –resopló Laura con hartazgo.
–Es más, con dinero puedes comprar toda la comida que quieras –continuó él–. No necesitas estar en un buffet mierdero.
–Yo sí te entiendo –intervino un tipo robusto de cabello escaso–. Hay gente que nace con platos muy grandotes y otros nacemos con platos para el café.
Laura arqueó las cejas, como el sabio maestro que se percata de que sus seguidores han malinterpretado sus ideas.
–Mi plato está de cabeza –se unió a la conversación una mujercita de grandes ojos–. Todo se le cae.
–Alguien llenó el mío de mierda –concluyó secamente un tipo de larga melena negra y lentes oscuros, que miraba atentamente a la mujer en mi mesa.
Laura suspiró pesadamente; tiempos difíciles para la filosofía.
–Laura tiene una teoría sobre la vida –dijo una pelirroja alta señalando a una flaca de cabello negro y mirada inteligente–. Cuéntasela, Lau.
La flaca no se hizo del rogar.
–OK. La vida es un plato –soltó sin más preámbulos.
–¿Un plato? –preguntó él, un tipo guapo, de cabello abundante y mirada de infinito aburrimiento.
–¿Te esperas? –respingó Laura.
–OK, OK –condescendió él.
–La vida es un buffet –retomó ella.
–¿No era un plato? –reviró él, feliz.
–¡Carajo, ¿me vas a dejar contártelo?! –explotó Laura.
–OK, perdón –dijo él sin convencimiento.
–La vida es un buffet –repitió Laura–. Al nacer te dan un plato y tú decides con qué llenarlo. El plato, como cualquier plato, es limitado así que debes decidir qué poner ahí. Así como en los buffets hay gente que se sirve sólo postres o camarones, igual pasa con la vida. Si quieres que en tu vida haya, por ejemplo, sólo dinero, no dejarás espacio para nada más.
–Pero si tienes dinero puedes comprar el plato que quieras –argumentó él con un gesto que dejaba en claro que pensaba que la teoría era una estupidez.
–Sabía que no lo entenderías –resopló Laura con hartazgo.
–Es más, con dinero puedes comprar toda la comida que quieras –continuó él–. No necesitas estar en un buffet mierdero.
–Yo sí te entiendo –intervino un tipo robusto de cabello escaso–. Hay gente que nace con platos muy grandotes y otros nacemos con platos para el café.
Laura arqueó las cejas, como el sabio maestro que se percata de que sus seguidores han malinterpretado sus ideas.
–Mi plato está de cabeza –se unió a la conversación una mujercita de grandes ojos–. Todo se le cae.
–Alguien llenó el mío de mierda –concluyó secamente un tipo de larga melena negra y lentes oscuros, que miraba atentamente a la mujer en mi mesa.
Laura suspiró pesadamente; tiempos difíciles para la filosofía.
23 comentarios:
el mio tambien tiene mierda :(
Creo que mi plato es de los deshechables de cartón...
(Comentario Emo patrocinado por Rimel Estrellita Negra)
Yo llenaría mi plato de chocolates...
Yo siempre me e guiado por lo que denomino filosofia bantu...espera....espera...espera....espera...espera...zas, ahora que no mira lanzazo :) Suele funcionar :) La vida es mucho más sencilla sabiendo esperar...y si no llega...por lo menos sabe uno esperar ;) Saludos
Ah! maldita Laura intensa
YO NISIQUIERA TENGO PLATO
(A mi no me engañan, el jehovany también ha de ser emo...)
emo... emosexual? tas pendejo yo no soy como tu
asi es... dificil tiempo para la filosofía. Besos don Rul
Yo ya dejé el pinche plato en la mesa, y me dediqué a buscar algo en el bar.
Yo tengo un plato volador.
Mi plato es de peltre y en el solo hay frijoles ¿que quiere decir eso?
Probablemente estar "aplatanado" tiene que ver con la cosmovisión cuyo centro es el plato de Laura. Saludos,
Rafael Barceló D.
¿Y cuando te dice el mesero "Está caliente su plato"?
Uhuhuhuhuh!
mi vida en un platillo volador, también se vale que no?
simon a mi tambien ya me tienen hasta la madre...pero ps esas rolas del chente estan llegadoras y en el trabajo no puedo abrir el yutub
¿Que la vida no era como una cada de chocolates?
Llegué hasta aquí porque, como muchos otros, soy re-fan de Oxidente. Tu biografía del desconsuelo me tiene fascinada, jajaja. Ni siquiera recuerdo si he comentado antes, lo cierto es que eres dueño de uno de esos blogs a los que dan ganas de regresar.
Respecto al plato, no tengo nada que decir, jajaja.
hey...donde te has escondido... descxuelgate de ese gancho en el closet y vuelve por aqui !!!
un abrazo
Hola Fernandito Villalona,
he leido tu blog (el cual me ha encantado, no se si sea por irreverente o por profundo, me encuentro haciendo una tarea sobre blogs, quisiera me contestaras unas preguntas, están en este blog desde donde te escribo. ojalá pudieras ayudarme.
Caro
me gustó tu blog, felcidades
nos estamos visitando
hora del deceso?
De verdad tu blog es la neta...no me había divertido tanto desde hace mucho, como lo hice toda esta mañana leyendo tus post... Este me parecio el indicado para comentar...seguro que volvere pronto y muy seguido...
Por cierto...mi plato no es un plato, sino una ensaladera y a veces solo una copa de fruta...
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