sábado, julio 19

PROPÓSITOS DE AÑO SEMINUEVO

Julio es un estupendo mes para reflexionar, porque ya se nos fue la mitad del año y podemos afirmar con toda certeza que no alcanzamos (ni alcanzaremos) uno solo de los propósitos que hicimos en la cena de año nuevo (después de bebernos dos botellas de sidra Santa Claus y vomitar abajo del árbol de navidad).

Y era previsible: los propósitos de año nuevo normalmente son formulados como si fuéramos personas con una férrea disciplina y heroica fuerza de voluntad y no las piltrafas de espíritu débil y voluntad blandengue que en realidad somos.

Así que julio nos ofrece una oportunidad de renegociar con la vida y comenzar a hacernos propósitos acordes a nuestras capacidades. Es muy fácil, basta cambiar la redacción de los que hacemos año con año. Aporto ejemplos.

Propósito de año nuevo:
Prometo comer sanamente el resto de mi vida.

Propósito de año seminuevo:
Intentaré eliminar esporádicamente la Big Mac que me trago todos los días a media mañana. Por lo menos de aquí a septiembre.

Propósito de año nuevo:
Me levantaré todos los días una hora más temprano para hacer ejercicio.

Propósito de año seminuevo:
El próximo sábado cuando vaya a comprar mi dotación de cervezas para ver el futbol, no estacionaré mi auto en el lugar reservado para discapacitados, sino donde me toque y caminaré un poco hacia la tienda.

Propósito de año nuevo:
Dejaré de leer puras estupideces en los blogs porque me quitan mucho tiempo en mi trabajo.

Propósito de año seminuevo:
Mientras leo puras estupideces en los blogs pensaré cómo aprovechar todos esos conceptos para ser más productivo en mi trabajo.

Es recomendable hacer una nueva revisión en diciembre para determinar en cuántos de estos propósitos se tuvo éxito y en cuántos no. Lo más probable es que el fracaso sea estruendoso, pero gracias a la sensación de derrota que nos acompañará durante las repulsivas fiestas decembrinas, es poco factible que caigamos nuevamente en la patética costumbre de hacer propósitos de año nuevo y así estaremos en condiciones de concentrarnos en aquello que en realidad vale la pena: vaciar las botellas de sidra Santa Claus. Y con suerte vomitar el arbolito.



5 comentarios:

Unknown dijo...

no pude dejar de sentirme deprimido (termino correcto :triste) luego de leer esto. Creo q para mi no habra´otra oportunidad sino hasta el otro año o el 2012 cuando empiza un nuevo ciclo universal je

Libradita dijo...

el tercero de la lista me lo he planteado dos años in a row y nada... aqui estoy :(

Lilián dijo...

Habla por ti. La gente con autoestima alta, como yo, cumplimos TODOS nuestros propósitos antes de que terminara el primer semestre del año. Ja-Ja.








Claro que mis propósitos eran beber más alcohol e insultar vedettes en las calles.

Checo Ramírez dijo...

ja uyy yo desde como hace dos años, cinceramente deje de hacerme propositos, a hora hago despropositos que es un poco peor...

foquer dijo...

jajaj

propoisito de año nuevo:
dejar de gastar mi dinero en conciertos

proposito de año seminuevo:
seguramente, si vendo el playstation y la tele, me alcanca para la reventa de madonna