viernes, mayo 21

DESAPARICIONES

Hay gente a la que le asusta que se le aparezca un muerto, un fantasma o un monstruo. A mí más que las apariciones lo que me aterran son las desapariciones.

Todos alguna vez hemos pensado en desparecer: dejar atrás familia, pareja, amigos, trabajo y obligaciones y comenzar una nueva vida. Algunos no se conforman con soñar y lo hacen realidad: un buen día buscan un pretexto cualquiera (comprar cigarros es el más socorrido), salen a la calle y jamás vuelven.

No obstante, hay otras desapariciones menos encomiables: las involuntarias. Los motivos son muchos y de diversas naturalezas, y van desde caer en un hoyo en el bosque hasta ser abducidos por extraterrestres, pasando por supuesto por todo el espectro (casi inabarcable) de las posibilidades políticas. Algunos regresan, otros no.

Cualquiera que sea el caso, toda desaparición deja hoyos: en el círculo de familiares y amigos del ausente, en su trabajo, en la comunidad, en el sistema de impartición de justicia que no puede hallarlo y en la sociedad que no pudo evitarlo. Pero sobre todo, la desaparición de una persona deja un hoyo oscuro y profundo en nuestra percepción de la realidad, en nuestra idea de cotidianeidad que nos dice que la gente no desaparece, que es desconcertante y angustioso sean cuales sean los motivos, aunque la desaparición sea previsible, buscada e inevitable.

10 comentarios:

maldito desgraciado dijo...

a estas alturas, no creo que el jefe diego haya ido a comprar cigarros :)

Espaciolandesa dijo...

Siempre se siente feo.

No sé, indigna y asusta a la vez.

Tanta gente que desaparece y nadie dice algo.

Tienes que ser famoso para que se sepa.

Y eso es lo que asusta, si alguien conocido desaparece así nomás ¿qué será de los simples civiles como nosotros?

Será lo que sea, pero pensar en el inter, en que si alguien desaparece tanto tiempo se espera ya lo peor, es feo.

Nadie se merece eso.

Diabla Región 4 dijo...

no sé que me da más temor, las desapariciones o el hecho de que nos estemos acostumbrando a ellas en una suerte de domesticación, después de un par de días a nadie le interesan hasta que haya un nuevo desaparecido y así ad infinitum.
creo que es hora de beber alcohol

Freddy dijo...

A mi desgraciadamente el amor y los buenos deseos no se me dan para todos, qué le voy hacer, ni modo.

Lo digo porque hay gente a la que desaparecen, como el panista éste, que más bien creo firmemente se trata de una vulgar cortina de humo política, y otros como jefes del narco, etcétera. A este gente yo sí le deseo lo peor, eso que los borren por consecuencias de acciones que hacen o hicieron.

El panista por allá de los noventa cuando en México se conocía sobre VIH/SIDA, dijo tajantemente como es su forma de expresarse, que eso era un tema de jotos, y que bueno que se morían, era castigo.

Eso es lo menos que ha dicho y hecho.

Por otro lado, sí me indigna y me duele sobremanera los indígenas y activistas políticos, y mujeres que desaparecen las bandas de sicarios, los partidos políticos, los empresarios pudiente, en aras de borrar evidencias que les señalen las injusticias e infamias que están cometiendo contra la sociedad, el país, le medio ambiente, el mundo.

Que sea tu corto, pero nunca olvidado post, mi querido Rulo, una dedicatoria a las mamás, ya ancianas, que nunca han dejado de buscar a sus hijos desde los años 60, a los huérfanos indígenas que hoy hombres grandes siguen en la lucha.

Yo, yo sólo puedo sentir dolor por esos crímenes contra la libertad, y hago todo lo que puedo y siento para ayudar, intentar, vivir un contexto mejor, más humano.

Unknown dijo...

Ya lo mencionaron pero de aún así lo reiteraré: asusta también y quizás más que comienza a volverse 'costumbre'.

Alnilam ريداي dijo...

mas bien para mi es una costumbre, por salud mental... siempre es bueno desaparecerse un rato para pensar...

Unknown dijo...
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taranto dijo...

Hola mi cuate,
desde Manizales te empezamos a leer.

Por acá no salimos a la calle por temor a desaparecer: "Falsos Positivos".

Cuate, chéveres tus notas.

Volveremos a hurgar tu blog.
Considerenos parceros.

Estamos en: chipreviejo.blogspot.com

Y hasta luego, porque por acá, sonaron: 4 balazos.....................

El Tipo dijo...

Por unos instantes me hiciste regresar en el tiempo.

En la preparatoria había una chica morenita, delgada y muy bajita que no molestaba nunca a nadie. Su presencia no era notoria y nadie la veía muy a menudo, no obstante ahí estaba diario.

Un día simplemente ya no llegó y nos informaron... había chocado y muerto en un accidente de automóvil. Su presencia aunque pequeña e inconstante fue un vacío impresionante... Desde ahí las muertes no me causan miedo... me causan un vacío... como bien lo describiste.

Naomi Lilith Janus dijo...

Coincido con todos los que han dicho que, desgraciadamente, estamos tan acostumbrados a eso que llaman tragedias en otros países:Secuestros, muertes, sicarios y blahblahblah.Me pregunto yo, hasta cuando nos ha de servir como lección al pueblo de que el supuesto poder no hace nada evitar que su rebaño se muera? Solo espero que recuerden que sun borregada no hay pastor.....Saludos Don Rul