La ventaja de estar en crisis y no tener ni un clavo para irse a apretujar con millones de devotos católicos a alguna playa llena de cáscaras de frutas y señoras sin depilar embutidas en trajes de baño de dimensiones colosales, es que uno puede sentarse a reflexionar en cosas como la vida y sus consecuencias.
La desventaja es que eso tampoco sirve de nada.
La desventaja es que eso tampoco sirve de nada.
3 comentarios:
Cha-le. Pero buen-blog
Que va hombre, la vida no es complicada, los complicados somos nosotros, mira los gatos, vivn y no se complican la vida. Saúds e apertas
Lo es. Y ni que refutar.
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