Edurne es bella. Bella como sólo pueden serlo las mujeres que no han conocido el amor. Muchos, todos tal vez, se refieren a ella como perfecta. Pero sólo yo sé que Edurne no tiene sexo. Por alguna extraña razón biológica o metafísica, la pubis de Edurne es tan lisa como una playa virgen. Ninguna hendidura interrumpe la continua exquisitez de su piel. La piel tabaco que dibujó las más delicadas curvaturas, –tal vez ensimismada en el tallado del precioso ombligo– olvidó construir un poco más allá el abismo en el que se hunde el misterio último de la humanidad.
Edurne no tiene sexo. Nunca dará o recibirá los placeres del amor. Nadie lo sabe. Todos piensan que es perfecta. Quizás lo sea.
Edurne no tiene sexo. Nunca dará o recibirá los placeres del amor. Nadie lo sabe. Todos piensan que es perfecta. Quizás lo sea.
12 comentarios:
Que bueno que no soy perfecta... tengo vagina.
lol, gracias pro las mujeres imperfectas entonces.
Guácala...¿es un maniquí?
La perfección da asco.
está padre el texto pero ¿no crees que ya es hora de que dejes de jugar con tus barbies?
La perfección la hará libre.
Su texto me hizo pensar en un cuadro de Magritte.
Por qué será Dr. Rul?
muy bueno tu post...
Ella no es perfecta. Pero un hombre con esas características, sí lo sería!. Al fin que los dildos ya hacen maravillas.
Ahh Don Rul, que se me hace que te compraste la Barbie Blogger...
Por cierto, las letras de la sopa ya venían así en la cucharada, nomás las medio acomodé y les tomé foto...
¿Y porqué habría de quedármele viendo a una cucharada de sopa de letras antes de metermela a la boca?
Es que no quiero terminar comiendo una palabra fea, como CANCER o LEUCEMIA o ELBAESTHER...
A mi me suena a muñeca inflable, espera, esas si tienen, entonces me suena a muñeca de trapo, qué cosas me haces pensar. frío.
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